Todo lo que siento se hace más largo e intenso cada segundo.
Que tu saliva recorra mi ser. Que mi lengua haga de ti un amanecer.
Que todo
tu cuerpo sepa responder. Que mis manos te necesitan para no ver el ayer.
Porque todo lo que nos recorre son miles de
estrellitas enloquecidas que no dejan de correr.
Porque todo lo que necesito es tu sur, tu este, tu oeste, y tu norte.
He de admitirlo, los días sin tin serían precipicios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario